29/12/2011

LA VIDA CAMBIADA

Cuando llegasteis a ser Cristiano hubo un cambio grande en tu vida. Jesucristo tomó tu lugar, y murió por ti en la cruz. Todos tus pecados fueron puestos en Jesucristo, y él murió en lugar tuyo. En esa gran transacción Cristo tomó todos tus pecados y todas tus culpas, y tu recibisteis su justicia como tu posición eterna en Cristo.
El apóstol Pablo expresó este gran principio espiritual en las siguientes palabras. “Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios” (II Corintios 5:21)
El apóstol Pedro hizo el mismo énfasis cuando escribió lo siguiente. “Porque Cristo también murió por los pecados una sola vez, el justo por el injusto, de manera que el pueda llevarnos a Dios, habiendo sido puesto en la muerte en cuerpo, pero hecho vivo en el espíritu” (II Pedro 3:18) Cristo llevó al madero nuestros pecados, para que muramos al pecado y vivamos para la justicia; por sus heridas ustedes han sido sanados” (I Pedro 2:24) El que estaba libre de pecado murió por el pecador.
JESUS MURIO COMO NUESTRO SUSTITUTO
Nuestra buena relación con Dios está basada en lo que Cristo hizo por nosotros en la cruz. Jesús murió por nosotros. Él tomó nuestro lugar en la cruz y pagó el precio de nuestros pecados. La Biblia dice, “Por que la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús nuestro Señor” (Romanos 6:23)
Hemos sido salvados por gracia por medio de la fe. Sin embargo, al reconocer que nadie es justificado por las obras que demanda la ley sino por la fe en Jesucristo, también nosotros hemos puesto nuestra fe en Cristo Jesús, para ser justificados por la fe en él y no por las obras de la ley; porque por éstas nadie será justificado.” (Gálatas 2:16)
Justificación es una posición legal con Dios basada en la muerte y resurrección de Cristo y nuestra fe en él. La palabra que Pablo usa (dikaioo), viene de la corte legal Romana significando justicia. Por lo tanto, justificación es el pago legal y formal de la culpabilidad por Dios quien es el Juez. Es el pronunciamiento del pecador como justo, quien cree en el Señor Jesucristo.
Supongamos por un momento que muero por la noche y estoy ante Dios quien es el Juez Supremo del Universo. De seguro que me preguntara, ¿Wil Pounds, por que debería de dejarte entrar al cielo? Tú eres un vil pecador. ¿Qué vas a alegar?”
Mi respuesta sería, “Yo alego culpabilidad, su señoría.”
Mi abogado, Jesucristo, quien esta a mi lado y es el que habla por mí. El dice, “su señoría, es cierto que Wil Pounds es un gran pecador. El es culpable, sin embargo, Padre, Yo morí por él en la cruz y resucite de los muertos. Wil Pounds ha puesto su fe y á confiado en mi y por todo lo que yo hice por él en la cruz. Él es un creyente. Yo morí por él, y me ha aceptado como su sustituto.”
Dios viene a mí y dice, “¿Es eso cierto?”
Yo responderé a él, si, Señor! Esa es la verdad. Estoy clamando a la sangre derramada de Jesucristo para limpiarme de todo pecado. He puesto mi fe en Jesús para salvarme por toda la eternidad. Esto es lo que tú has prometido en tu palabra. Jesús dijo, “Por que de tal manera amo Dios al mundo, que dio a su hijo unigénito para que todo aquel que en él crea no se pierda mas tenga vida eterna.”
Dios responde: ¡Absuelto! Por orden de esta corte yo demando que seas puesto en libertad. El precio ha sido pagado por mi hijo.”
Por lo tanto, ahora puedo irme a casa y vivir con el Juez!
Justificación significa que en el momento de la salvación Dios soberanamente declara al pecador creyente justo a su mirada. El pecador creyente es declarado ser justo ante Dios.
En el momento que tu creísteis en Cristo como tu salvador personal, algo maravilloso ocurrió dentro de ti, te volvisteis una nueva persona, con nuevas motivaciones, nuevos intereses y nuevos principios. El Apóstol Pable nos dice que es lo que paso. De modo que si alguno esta en Cristo, nueva criatura es, las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas (II Corintios 5:17)
Algo también sucedió a ti, fuisteis automáticamente e instantáneamente llamado a ser parte en la familia de Dios. Necesariamente no te sentisteis diferente, ni escuchasteis cantar a los ángeles, ni voces, pero fue en ese momento que llegasteis a la familia de Dios.
Hay un nuevo estilo de vida que sigue a la conversión por que Jesús a través de su Espíritu Santo ha venido y ha tomado la residencia en ti. Él desea entrar y morar en tu corazón. (CF. Efesios 3:14-21)
Es radicalmente una vida diferente. La Salvación ha ocurrido, tengo nueva vida en Cristo; por lo tanto mi vida no puede ser la misma. No puedo vivir de la misma manera, por que ahora estoy en Cristo y no puedo tener el mismo estilo de vida.
Si, habrá tiempos en donde la derribaré, pero habrá cambios. El pecado viene de mi naturaleza pecaminosa. Estará allí hasta que yo sea glorificado con la venida de Cristo. La tensión constante existirá entre las dos naturalezas. Lea Romanos 7:1; Juan 1:6-9)
La esperanza de un cristiano es una esperanza viviente para hoy, y para mañana. Ahora que somos salvos por la gracia por medio de la fe, Cristo quiere vivir su vida a través de nosotros.
VIVIMOS LA VIDA CRISTIANA POR GRACIA POR MEDIO DE LA FE.
“Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él; arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias.” (Colosenses 2:6,7) ¿Cómo recibiste tú a Cristo? Le recibisteis en tu corazón por gracia por medio de fe.
La nueva versión internacional lo dice así, “Por eso, de la manera que recibieron a Cristo Jesús, vivan ahora en él, confirmados en la fe como se les enseño, y llenos de gratitud.”
El principio de la vida cambiada puede ser simplemente establecido en las palabras de Pablo en Gálatas 2:20. Pablo dice,”...no vivo yo, mas vive Cristo en mí.” De nuevo él dice, “Cristo en vosotros....la esperanza de la gloria” (Colosenses 1:27).
La vida cristiana es el trabajo de Dios en ti. Es tu fe en la suficiencia de aquel que está en ti.
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí, y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20) “Con Cristo he sido co-crucificado.” Cuando yo creí en Cristo fui unido con él, entonces tengo conexión con Cristo, que su crucifixión viene a ser mi crucifixión. Parte de mí murió allí en la cruz. Mi vieja naturaleza carnal fue quitada en la cruz. Ahora no vivo en la muerte allí, sino que vivo en el poder de la resurrección.
La vida que ahora vivo la vivo en la fe del Hijo de Dios quien dio su vida por mí.
Pablo amonesta a los creyentes romanos. Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro” (Romanos 6:11)
Nuestras vidas son identificadas con Cristo. Somos identificados con él en nuestro bautismo el cual es un símbolo maravilloso de su muerte y resurrección. Es también un retrato espiritual de nuestra co-crucifixión, co-muerte, co-resurrección con Cristo.
Si yo coloco una tarjeta de 3x5 en medio de las paginas de mi Biblia esa tarjeta viene a ser parte de mi Biblia. Y a todo lugar que yo llevo mi Biblia la tarjeta va allí conmigo. Si yo pierdo mi Biblia también pierdo la tarjeta 3x5. La tarjeta es ahora parte de mi Biblia, de igual manera yo ahora soy identificado con Jesucristo a través de su muerte y su resurrección, y la vida nueva que el Espíritu Santo me ha impartido la cual está en Cristo. Voy a donde él va. (Por favor lea y compare Juan 10:27-30 y Juan 15)
El deseo del Apóstol Pablo fue “Y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia es que Dios por la fe; a fin de conocerle, e el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte...”(Filipenses 3:9-10)
“Por que si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más estando reconciliados, seremos salvos por su vida” (Romanos 5:10)
“De hecho, en el evangelio se revela la justicia que proviene de Dios, la cual es por fe de principio a fin, tal como está escrito: “El justo vivirá por la fe.” (Romanos 1:17, NIV)
CRISTO QUIERE VIVIR SU VIDA POR MEDIO DE NOSOTROS.
Es solamente la vida de Cristo---Su actividad, revestido de ti y desplegado por medio de ti, que últimamente puede encontrar la aprobación de Dios. Es el Señor Jesús sólo quien hace nuestros sacrificios sean aceptados por Dios.
Solamente lo que Cristo hace en ti y por medio de ti amerita la aprobación de Dios. Eso pueda ser la verdad más difícil de aprender en la vida cristiana. Jesús dijo a sus discípulos “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en Mi y yo en él, éste lleva mucho fruto. Pero separados de Mi, nada podéis ” (Juan 15:5)
Queremos hacerlo nosotros mismos. Hacerlo a nuestra manera, y de la manera que nosotros pensamos que es la mejor. Queremos obtener todo el crédito. Ahora que somos salvos pensamos que podemos hacer todo en nuestras propias fuerzas humanas. Aun tratamos de conducir su trabajo en nuestra carne. Dios no tendrá nada de eso.
Dios no aceptara nada si no es de la manera de él. Mucho de lo que hemos hecho en el nombre de Jesús será quemado porque lo hemos hecho en el poder y motivaciones carnales.
El apóstol Pablo dice:
“Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica. Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y lo obra de cada uno cual sea, el fuego la probará. Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego” (I Corintios 3:10-15)
Hay una forma de actividad cristiana que es razonable para un consumo inmediato. Nos Impresiona a todos. Atraerá multitudes. Producirá aplausos. Siempre producirá hedor detrás de si, si proviene de la carne. Nunca reproducirá el fruto del Espíritu Santo.
LA VIDA CAMBIADA ES UNA VIDA DE FE
¿Puede surgir cualquier situación posible en cualquier circunstancia, Para la cual Cristo sea suficiente? ¿Puede surgir cualquier tipo de presión, promesa, cualquier problema, y cualquier responsabilidad por la cual el Señor Jesús sólo no sea suficiente?
¿Cuando yo reconozco la total suficiencia de Cristo en mi, existe alguna situación a la cual Cristo no sea suficiente? Entonces es una indicación clara que yo no estoy en la voluntad de Dios.
Cristo es limitado solo por la medida de nuestras disponibilidades a todo lo que él hace disponible a nosotros.
LA VIDA CAMBIADA ES UNA VIDA CONTROLADA POR EL ESPIRITU
Ya que la vida cambiada es un paso de fe deberá ser una vida que esta llena o controlada por el Espíritu Santo. Cuando somos llenos por el Espíritu Santo estamos permitiendo que el Espíritu Santo ocupe nuestra personalidad completa con la cualidad de Cristo.
Jesús dijo, “El que cree en mi, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva. Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él, pues aun no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había sido aun glorificado” (Juan 7:38-39)
Cuando estoy bajo la influencia del Espíritu Santo yo estoy atraído sobre los recursos ilimitados de Cristo. La vida de resurrección de Jesús es impartida al verdadero creyente por la presencia del Espíritu Santo.
“Cristo vive en mí, y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20b)
Hace muchos años escuche a un evangelista argentino, Santiago Garaballe, dar una ilustración de un hombre que trajo un carro nuevo. Nunca había sido dueño de un carro en toda su vida. El carro venia con un poderoso motor. ¿Que sería de ese hombre si él terminara empujando el carro toda su vida? ¿Te imaginas que clase de vida sería para él? Cada ves que él fuera en el carro siempre sería necesario que alguien ande el carro y otra persona empujando! ¿Que pasa si alguien viene a él y le dijera, Santiago, Por que tu siempre andas empujando el carro? ¿Acaso es que no tienes gasolina en él?”
“ Por que, Si” dijo Santiago. “Vino con un tanque lleno de gasolina, pero no sabía que hacer con él.”
“Aquí, déjame enseñarte Santiago. Pon la llave aquí y empieza a encenderlo. Hombre, escuchas el motor arrancar....ahora si hay poder real. Ahora vamos a dar un paseo.”
En la vida cristiana tu tienes un motor fuerte bajo el fuelle, nada menos que la vida de resurrección de Cristo hizo disponible a usted por medio de la persona de Dios el Espíritu Santo quien vive en ti. Deja de empujar! Enciende el motor.Abandona toda tentación, toda oportunidad, toda eminencia de circunstancia, cada situación de amenaza a la energía divina de Cristo en ti.
Que maravilloso es estar en una intima y personal relación amorosa con Dios, que todo lo que tu necesites, en cualquier circunstancia, es siempre tuya, por la mano de Dios en ti.
DIOS TE HA DADO RECURSOS ILIMITADOS
“Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra..” (II Corintios 9:8). Wow! Esa es una promesa que Dios hace para todos nosotros.
“Gracia y paz sean multiplicadas, en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús, como todas las cosas que pertenecen a la vida y la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia” (II Pedro 1:2-4,)
Déjame ilustrar. Yo puedo decirle a este guante, “guante, levanta esta Biblia.” De manera que ese guante no podrá hacerlo. Tiene todos los recursos. Tiene un dedo grande, otros pequeños, y forma de una mano. De tal manera que es imposible hacer lo que yo mando a hacer. Por otro lado tengo otro guante que si a recogido muchas veces mi Biblia, pero cuando mi mano esta dentro de ese guante, el guante llega a tener la misma fuerza de mi mano, y todo lo que es posible a lo que mi mano haga, también para el guante le es posible hacer. El guante simplemente arropa la actividad de mi mano.
Dios puede usar cualquier guante viejo que ha sido reconciliado con él, y lo reserva para su uso.
Tú eres el guante y Cristo la mano. Todo lo que es posible para él es posible para ti.
El apóstol Pablo escribió a los corintios en Filipo, estas palabras de aliento, Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:13)
La presencia del Cristo viviente, por su espíritu dentro de ti, imparte a ti todas las cosas de la vida y de la bondad. Cristo ha proveído por ti todo lo necesario para vivir una vida de justicia.
Nos gozamos cuando cantamos este canto bonito:
Fuera de mi esclavitud, dolor y noche.....
Hacia la libertad, orgullo y luz........
Fuera de mis enfermedades hacia la sanidad......
Fuera de mis deseos hacia la riqueza.....
Fuera de mi pecado hacia ti mismo.....
Jesús, yo vengo a ti!
El anciano profeta Isaías describió una situación en la cual la gente de Israel se sintió débil para completar el propósito de Dios. El profeta les recordó acerca de un Dios eterno quien nunca esta agotado ni cansado. El nunca carece en sabiduría o poder para completar su propósito eterno. Aunque nosotros nos sintamos agotados o cansados él nos recuerda del versículo “Los que confían en el Señor renovaran sus fuerzas; volarán como las águilas; correrán y no se fatigaran; caminaran y no se cansaran.” (Isaías 40:31, NIV) En las versiones King James y New American Standard encontramos la siguiente palabra, “pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas. Isaías usa una palabra bonita para describir (qavah, kaw vaw) el único parentesco entre el Señor Dios y su gente quienes caminan por fe. La palabra traducida “esperar” o ”esperanza” en lo original tiene la idea de permanecer juntos (perhaps by twisting), i, e., coleccionar o juntar.
Para aquellos que pacientemente esperan en el Señor él nos da fuerza en nuestras vidas y nos da fuerza interna. Podemos vivir sobre oportunidades, los cambios de circunstancias de vida. Cambiamos nuestras debilidades por su fuerza. Solamente podemos tener esas fuerzas si esperamos en él y en acercarnos más a él.
Cristo no solamente murió por salvarte de tus pecados en el pasado, no por darte vida eterna para que tu puedas ir al cielo, sino para darte su vida de resurrección hoy.
Él da de su fuerza a tus debilidades. Te da de su sabiduría a tus tonterías. Él da de su gracia a tus anhelos. El da de su amor a tu lascivia. El da de su paz a tus conflictos. El da de su gozo a tus dolores. El da de su perdón a tus culpabilidades. Él da de su abundancia a tus pobrezas.
Por unos años era de mi costumbre andar en avión cada 2 meses a Bogota, Colombia de Quito, Ecuador. La ciudad de Bogota es muy bella mirándola desde lo alto de un avión. Mi amigo Eric vive en una ciudad alta en las montañas de los Andes. Su familia son dueños de la compañía Cessna. Un Domingo cuando yo estaba ministrando en una de las Iglesias Bautistas en Colombia, mi amigo Eric me invito a volar mientras el día estaba caluroso. Subimos hasta esta Cessna Séneca III que acababa de rodar de la línea de montaje. Estaba equipado con el último radar del tiempo a colores, y con un motor jet muy fuerte. Es un equipo con piezas maravillosas. Mientras volamos en lo alto y circulábamos podíamos ver la montaña áspera de Tabor asomándose por las nubes. Esa montaña hostil ha causado la muerte de cientos de pasajeros.
Supongamos que después de haber volado por un rato Eric me mira y me dice, “Don Wilfredo, toma los controles y empieza a volar este avión bonito.”
Yo respondo, “Eric, yo no puedo volar. No tengo licencia como piloto aquí en Colombia. ¿Por que? Nunca tome lecciones para volar un avión en mi vida.
“Don Wil, He sido bendecido con este regalo maravilloso que me facilita volar este avión a través de ti. Yo Tengo este poder secreto de entrar en tú mente, y mi espíritu volará este avión por tu medio Todo lo que tú tienes que hacer es confiar en mi. Wil con tu conocimiento y pon tu confianza en mi.”
Mis pensamientos fueron así: Eric tú eres un loco., Yo te he conocido por poco tiempo, pero tú pareces que ya lo olvidasteis.”
“No, Don Wil, solamente confía en mi, todo lo que tienes que hacer es eso confiar y yo podré volar este avión a través de ti, ahora toma tú la palanca!” Yo le dije, bueno no se nada de esto, pero trataré. Yo tomé los controles del avión III, hombre tú hablas acerca de un avión fácil de volar. Realmente es maravilloso, le daba para la derecha, para la izquierda y me alejaba de la montaña Tabor. El volar es un sueño. Los controles me respondían y volé tal como que si yo lo haya hecho antes y por mucho tiempo.
Después miré a Eric, y le dije muy emocionado, “hombre esto es bueno, mírame le estoy haciendo de lo mejor.” De repente el avión se descontrolo y también yo, si Eric no hubiese estado allí para controlarlo creo que hubiésemos estado en un peligro terrible.
La vida Cristiana es una vida cambiada. “Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, más Cristo vive en mí” (Gálatas 2:20) Pablo experimentó ese estilo de vida. Cuando estuvo en la prisión en la ciudad de Roma él dijo, “Para mí el vivir es Cristo” (Filipenses 1:21)
Ese es el resultado de la vida del cristiano. Jesús vino a mi vida a habitar desde el momento en que confesé mis pecados y la infidelidad hacia él. Me liberé de la infidelidad para poner mi fe y confianza en él como mi salvador personal. En el momento que nací espiritualmente un nuevo nacimiento tomó lugar, y allí es donde Cristo vino para vivir dentro de mi.
Jesús nos dice y nos pide que en el momento que caigamos en tentación, cuando nuestra fe falle, cuando pequemos, cuando estemos débiles, que confiemos en él. Tu no entras a tus propias fuerzas, si no que entras en las mías.
¿Estas tu viviendo en Cristo? Cristo es todo y esta en cualquier tiempo, en cualquier situación, y circunstancia. “Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él” (Colosenses 2:9,10)
Jesús dice que él nunca nos dejará ni desamparará. Estas tú descansando en él.

24/12/2011

Recursos Ilimitados en Cristo

William Carey, el padre del moderno movimiento misionero dijo: "Espere grandes cosas de Dios; intente grandes cosas para Dios."
El lema de Carey es similar al de D.L. Moody's, que escucharon los retos de un pastor que dijo: "El mundo aún tiene que ver lo que Dios hará por medio de un hombre totalmente entregado a él." La respuesta de Moody's fue: " Por la gracia de Dios voy a ser ese hombre. "
En Juan 6:1-14 Andrés y Felipe enfrentaron un gran desafío. Multitudes se mantuvieron siguiendo a Jesús porque estuvieron continuamente viendo las señales que Él estuvo continuamente realizando en aquellos que estaban enfermos (v. 2). Jesús subió a la montaña y viendo a la gran multitud reunida le dijo a Su discípulo Felipe, "¿De dónde compraremos pan para que coman éstos?" (V.5). Inconsciente de que él estaba en la presencia del todo suficiente Cristo, él dijo, "Doscientos denarios de pan no bastarían para que cada uno de ellos tomase un poco."
Andrés habló y dijo: "Aquí esta un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; más ¿qué es esto para tantos?" (V. 9).
¿Qué habría hecho si ve 5000 hombres hambrientos reunidos juntos? ¿Se habría desesperado? Como cuando usted enfrenta dificultades, casi situaciones imposibles en su vida, ¿Cuál es su típica respuesta? ¿Usted las lleva al Señor? ¿En qué confía cuando se enfrenta a los retos de la vida? ¿Confía en su dinero, el intelecto, las personas y organizaciones? ¿Usted se preocupa cuando ellas no proporcionan sus necesidades?
Felipe y Andrés sacaron a Cristo de esta situación. No tenemos suficiente dinero, y no sabemos dónde podemos obtener esta cantidad. Cinco panes de cebada y dos pescados secos es todo lo que tenemos. "¿Qué es esto para tantos?"
Con Cristo es más que suficiente. Su deseo es bendecirnos abundantemente.
Si algo iba a suceder, Felipe y Andrés tenían que echar sus cargas sobre Dios por providencia. ¿Cuáles son las grandes necesidades que están ante usted hoy en su ministerio? ¿Ve las multitudes de pie ante usted en extrema necesidad? ¿Qué va a hacer? ¿Cómo va a afrontar el reto? ¿Se va a quedar sin dinero para hacer frente al reto que Dios ha puesto ante usted? ¿Son sus recursos cinco pedazos de pan y dos pececillos?
No hay nada que Dios no pueda hacer en su vida si es conforme a Su voluntad; Él lo ha hecho en cualquier otra vida Cristiana en la historia de la Iglesia. Él es tan activo en su iglesia hoy como lo fue en los tiempos del Nuevo Testamento.
Si Él ha puesto algo en su vida para probarlo; Él lo ha hecho con el fin de que usted y otros traerán gloria y honor a su santo nombre.
¿Se ve a usted mismo como insignificante e ineficiente? ¿Qué son cinco pedazos de pan y dos sardinas en las manos de nuestro omnipotente Dios? ¡Todo! Dos sardinas pueden ser inútiles para usted, pero no para Dios. Si usted toma lo que usted es y lo que tiene y se lo da al Señor para utilizarlo como a Él le complace, usted encontrará que es más que suficiente para la misión que Él establece para usted.
Todo lo que Él le pide a usted, es que usted este disponible para Él un día a la vez. ¿Está preparado para que el Maestro amplíe sus horizontes? ¿Va a confiar en Él? ¿Va a entregar lo que Él le ha dado a usted en Sus manos? ¿Va a entregar cualquier cosa en sus manos al Señor? Todo lo que Él le pide a usted es que usted este disponible para Él al igual que el muchacho con los cinco pequeños panes de cebada y los dos peces.
Quizás usted es uno de la multitud y que hoy esta en necesidad. ¿Ha pedido a Dios que supla esa necesidad? El apóstol Pablo vivió por la convicción, "Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús " (Filipenses 4:19). ¿Usted le pide a Él en todo lo que usted tiene necesidad? Jesús conoce su situación en este momento. Él está enterado de sus necesidades actuales, y Él le suplirá todas sus necesidades conforme a Sus abundantes provisiones.
Jesús es el único pan que satisface al hombre espiritualmente. Pero siempre debe existir un reconocimiento de necesidad antes de que Él pueda cumplirlo.
Jesucristo es todo-suficiente. Él da alimento espiritual en abundancia.
¿Usted viene a Jesús diariamente esperando ser alimentado? A.W. Pink escribe: "Esto es lo que Jesús hace a todos los de su pueblo. Llega a los pobres creyentes en bancarrota, y, colocando en su mano un giro bancario sobre los recursos de los cielos, le dice, 'Escribe en el lo que tu deseas´ Este es nuestro precioso Señor. Y nosotros somos fortalecidos en él, no en nosotros mismos. Si somos pobres y débiles, o cansados y tentados, no es que no podemos ayudarnos a nosotros mismos-es porque no lo hacemos. Tenemos tan poca fe en las cosas invisibles y eternas. Nosotros sacamos poco de los recursos de Cristo. No venimos a El con nuestros deseos espirituales o nuestras vasijas vacías- y sacamos del océano de su gracia.

09/12/2011

Deidad de Cristo Jesús

El Dios cristiano y Salvador es Jesucristo.
En Tito 2:13 la naturaleza misma de Jesucristo es igual a Dios y es el mismo Dios. La palabra "Dios", junto con "Salvador", describe la naturaleza de Jesucristo. Cristo Jesús es Dios. Sólo hay un artículo en el griego, "el gran Dios y nuestro Salvador." Este es el significado preciso de este artículo con "Dios " y "Salvador." "El gran Dios y Salvador" se refiere a la misma persona, Jesucristo. John Gill, dijo, "¡Qué persona más maravillosa es el, porque Él es Dios manifestado en la carne!"
Juan 20:31 nos dice el autor escribió su Evangelio para que sus lectores conozcan que Jesucristo es Dios y solo poniendo su fe en Él podría tener vida eterna. Los "signos" que Juan eligió describir en este libro fueron escogidos para dar testimonio de la divinidad de Jesús. "Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios." En el Evangelio de Juan Jesús realizó milagros, y vive una vida sin pecado ante un mundo que observa. Los pecadores que ponen su confianza en Él son cambiados. ¿Por qué? Es precisamente porque Él es Dios.
Jesús dijo ser y es Dios en la carne, el Hijo de Dios, el Salvador de todos los que creerán en él. Otros testimonios en el Evangelio de Juan con respecto a la deidad de Jesús son Juan el Bautista (Juan 1:34), Natanael (Juan 1:49), Jesús (Juan 5:25; 10:36), Pedro (6:69), el hombre ciego sanado (Juan 9:35), Martha (Juan 11:27), Tomás (Juan 20:28) y el mismo apóstol Juan (Juan 20:30-31). Estos fueron los únicos de los muchos que podría haber optado por incluir en su libro.
Juan 20:28 es el testimonio de Tomás cuando vio a Jesús vivo después de la crucifixión. Jesús aceptó el testimonio de sus discípulos cuando declaró: "¡Señor mío y Dios mío!" La declaración podría ser traducida como "Tú eres mi Señor y mi Dios!" o "Tú eres mi Señor, mi Dios." El hecho es que la misma persona es mi Señor y mi Dios. Él no se está refiriendo a dos individuos diferentes.
El uso más significativo de la palabra "Señor" (kurios) en el Evangelio de Juan es confesar que Jesús es Dios. Es la más alta posible confesión de fe en Jesucristo. Kurios se utiliza en Juan en citas del Antiguo Testamento y es el nivel equivalente griego del nombre hebreo de Dios, Yahvé o Jehová (SEÑOR). Esta es la mayor confesión de la divinidad de Jesús. Tenemos que hacer la misma confesión, para ser salvos (Ro. 10:9-10, 13; 1:4; Hechos 2:36).
Jesús es visible en la carne (Juan 1:1-3, 14, 18; 8:58; cf. 2 Cor 8:9; Phil 2:5-9; Col. 1:17; Heb. 1:2f; Juan 17:5). El Logos preexistente "se hizo carne." El Logos es Dios eternamente. Jesús es Dios-Hombre. Por lo tanto, sus palabras y acciones son las del Dios-Hombre. Cristo, el Logos eterno, que es Dios, se hizo carne y habitó entre los hombres. La filiación de Jesús es única porque Él es eterno y es de la esencia misma como "el Padre."
En 2 Pedro 1:1 "La justicia de nuestro Dios y Salvador, Jesucristo" nos dice que Jesús es Dios y Salvador. La gramática griega que aquí se indica claramente que "Dios y Salvador" es una persona, no dos. Hay un artículo griego con dos sustantivos que indica que Jesucristo es el co-iguales en naturaleza, con Dios el Padre (Juan 1:1; 20:28; Tito 2:13, Mateo 16:16). La construcción del texto griego demanda a que traduzcamos, "nuestro Dios y Salvador, Jesucristo."
El artículo primero "el" (tou) con "Dios" y "Salvador" requiere precisamente una persona, no dos como en nuestro Señor y Salvador "en 2 Pedro 1:11; 2:20; 3:2, 18. En 1 Pedro 1:3 es "el Dios y Padre," de nuevo una persona, no dos. "La gramática es uniforme e inevitable" (AT Robertson). "La Gramática exige que una persona debe significar." Cristo Jesús es Dios de los cristianos y Salvador (Hechos 4:12).
En Hebreos 1:1-2 el autor nos presenta al Hijo como "la contrapartida exacta de Dios" (Moffatt). En el sentido absoluto Jesucristo es el "Hijo" de Dios. Él es el Hijo de Dios que revela al Padre (Juan 1:18). "La revelación fue un hijo-revelación" (Vicente). A lo largo de la eternidad Jesucristo era Dios el Hijo. No se hizo el Hijo de Dios cuando Él nació en la carne. Condescendió a ser hombre (Filipenses 2:5-6). "Y ahora, glorifícame tú, Padre, junto a ti, con la gloria que tenía contigo antes que el mundo existiera" (Juan 17:5). La Biblia NET dice: "Y ahora, Padre, glorifícame a tu lado con la gloria que tuve contigo antes que el mundo fuera creado" (Juan 17:5, NET). En su resurrección y ascensión, Jesús recibió de nuevo su gloria eterna. Su resurrección declaró al mundo entero que Jesús es el Hijo único de Dios.
Él "y que fue declarado Hijo de Dios con poder, conforme al Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos: nuestro Señor Jesucristo" (Romanos 1:4).
El apóstol Juan en el libro de Apocalipsis declara la plena deidad de Jesucristo, donde vemos que demostró los atributos y prerrogativas de Dios en el trabajo sobre la creación. Es una imagen de los ángeles y las criaturas vivientes, que decían a gran voz: El Cordero que fue inmolado digno es de recibir el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, el honor, la gloria y la alabanza. Y a toda cosa creada que está en el cielo, sobre la tierra, debajo de la tierra y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay , oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Y los cuatro seres vivientes decían: Amén. Y los ancianos se postraron y adoraron" (Apocalipsis 5:12-14). Hay muchos más pasajes de la Escritura que demuestran claramente que Jesucristo es Dios encarnado, la Segunda Persona de la Trinidad, y sólo Él es digno de nuestra adoración como Dios. !Emanuel ha venido, y Él está con nosotros!
Clave de las Escrituras
Juan 1:1-5, 14, 18; 8:58; Hechos 2:22-36; Mateo 22:41-46; Mateo 16:13-16; 2 Pedro 1:11; 2:20; 3:18; Juan 11:41-44; Colosenses 1:15, 19; 2 Pedro 1:1; 2 Juan 3; Judas 4; Apocalipsis 5:8-14; Romanos 1:8; 16:20; 1 Juan 2:22-25; Hebreos 13:8; Lucas 2:11; Filipenses 2:9-11
Permanecer en los principios y aplicaciones prácticas
1. Cuando plenamente estas conscientes de que Jesucristo es Dios la única opción es caer a sus pies y adorarle (Filipenses 2:9-11).
2. En esta doctrina bíblica el verdadero creyente en Jesucristo no puede comprometerse: Jesucristo es nuestro gran Dios y Salvador! ¿Se ha unido el gran coro de alabanza celestial cantando al Cordero que está sentado en el trono? (Apocalipsis 5:8-14)

07/12/2011

¿Estas tu viviendo en Cristo?

Cuando llegasteis a ser Cristiano hubo un cambio grande en tu vida. Jesucristo tomó tu lugar, y murió por ti en la cruz. Todos tus pecados fueron puestos en Jesucristo, y él murió en lugar tuyo. En esa gran transacción Cristo tomó todos tus pecados y todas tus culpas, y tu recibisteis su justicia como tu posición eterna en Cristo.
El apóstol Pablo expresó este gran principio espiritual en las siguientes palabras. “Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios” (II Corintios 5:21)
El apóstol Pedro hizo el mismo énfasis cuando escribió lo siguiente. “Porque Cristo también murió por los pecados una sola vez, el justo por el injusto, de manera que el pueda llevarnos a Dios, habiendo sido puesto en la muerte en cuerpo, pero hecho vivo en el espíritu” (II Pedro 3:18) Cristo llevó al madero nuestros pecados, para que muramos al pecado y vivamos para la justicia; por sus heridas ustedes han sido sanados” (I Pedro 2:24) El que estaba libre de pecado murió por el pecador.
JESUS MURIO COMO NUESTRO SUSTITUTO
Nuestra buena relación con Dios está basada en lo que Cristo hizo por nosotros en la cruz. Jesús murió por nosotros. Él tomó nuestro lugar en la cruz y pagó el precio de nuestros pecados. La Biblia dice, “Por que la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús nuestro Señor” (Romanos 6:23)
Hemos sido salvados por gracia por medio de la fe. Sin embargo, al reconocer que nadie es justificado por las obras que demanda la ley sino por la fe en Jesucristo, también nosotros hemos puesto nuestra fe en Cristo Jesús, para ser justificados por la fe en él y no por las obras de la ley; porque por éstas nadie será justificado.” (Gálatas 2:16)
Justificación es una posición legal con Dios basada en la muerte y resurrección de Cristo y nuestra fe en él. La palabra que Pablo usa (dikaioo), viene de la corte legal Romana significando justicia. Por lo tanto, justificación es el pago legal y formal de la culpabilidad por Dios quien es el Juez. Es el pronunciamiento del pecador como justo, quien cree en el Señor Jesucristo.
Supongamos por un momento que muero por la noche y estoy ante Dios quien es el Juez Supremo del Universo. De seguro que me preguntara, ¿Wil Pounds, por que debería de dejarte entrar al cielo? Tú eres un vil pecador. ¿Qué vas a alegar?”
Mi respuesta sería, “Yo alego culpabilidad, su señoría.”
Mi abogado, Jesucristo, quien esta a mi lado y es el que habla por mí. El dice, “su señoría, es cierto que Wil Pounds es un gran pecador. El es culpable, sin embargo, Padre, Yo morí por él en la cruz y resucite de los muertos. Wil Pounds ha puesto su fe y á confiado en mi y por todo lo que yo hice por él en la cruz. Él es un creyente. Yo morí por él, y me ha aceptado como su sustituto.”
Dios viene a mí y dice, “¿Es eso cierto?”
Yo responderé a él, si, Señor! Esa es la verdad. Estoy clamando a la sangre derramada de Jesucristo para limpiarme de todo pecado. He puesto mi fe en Jesús para salvarme por toda la eternidad. Esto es lo que tú has prometido en tu palabra. Jesús dijo, “Por que de tal manera amo Dios al mundo, que dio a su hijo unigénito para que todo aquel que en él crea no se pierda mas tenga vida eterna.”
Dios responde: ¡Absuelto! Por orden de esta corte yo demando que seas puesto en libertad. El precio ha sido pagado por mi hijo.”
Por lo tanto, ahora puedo irme a casa y vivir con el Juez!
Justificación significa que en el momento de la salvación Dios soberanamente declara al pecador creyente justo a su mirada. El pecador creyente es declarado ser justo ante Dios.
En el momento que tu creísteis en Cristo como tu salvador personal, algo maravilloso ocurrió dentro de ti, te volvisteis una nueva persona, con nuevas motivaciones, nuevos intereses y nuevos principios. El Apóstol Pable nos dice que es lo que paso. De modo que si alguno esta en Cristo, nueva criatura es, las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas (II Corintios 5:17)
Algo también sucedió a ti, fuisteis automáticamente e instantáneamente llamado a ser parte en la familia de Dios. Necesariamente no te sentisteis diferente, ni escuchasteis cantar a los ángeles, ni voces, pero fue en ese momento que llegasteis a la familia de Dios.
Hay un nuevo estilo de vida que sigue a la conversión por que Jesús a través de su Espíritu Santo ha venido y ha tomado la residencia en ti. Él desea entrar y morar en tu corazón. (CF. Efesios 3:14-21)
Es radicalmente una vida diferente. La Salvación ha ocurrido, tengo nueva vida en Cristo; por lo tanto mi vida no puede ser la misma. No puedo vivir de la misma manera, por que ahora estoy en Cristo y no puedo tener el mismo estilo de vida.
Si, habrá tiempos en donde la derribaré, pero habrá cambios. El pecado viene de mi naturaleza pecaminosa. Estará allí hasta que yo sea glorificado con la venida de Cristo. La tensión constante existirá entre las dos naturalezas. Lea Romanos 7:1; Juan 1:6-9)
La esperanza de un cristiano es una esperanza viviente para hoy, y para mañana. Ahora que somos salvos por la gracia por medio de la fe, Cristo quiere vivir su vida a través de nosotros.
VIVIMOS LA VIDA CRISTIANA POR GRACIA POR MEDIO DE LA FE.
“Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él; arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias.” (Colosenses 2:6,7) ¿Cómo recibiste tú a Cristo? Le recibisteis en tu corazón por gracia por medio de fe.
La nueva versión internacional lo dice así, “Por eso, de la manera que recibieron a Cristo Jesús, vivan ahora en él, confirmados en la fe como se les enseño, y llenos de gratitud.”
El principio de la vida cambiada puede ser simplemente establecido en las palabras de Pablo en Gálatas 2:20. Pablo dice,”...no vivo yo, mas vive Cristo en mí.” De nuevo él dice, “Cristo en vosotros....la esperanza de la gloria” (Colosenses 1:27).
La vida cristiana es el trabajo de Dios en ti. Es tu fe en la suficiencia de aquel que está en ti.
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí, y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20) “Con Cristo he sido co-crucificado.” Cuando yo creí en Cristo fui unido con él, entonces tengo conexión con Cristo, que su crucifixión viene a ser mi crucifixión. Parte de mí murió allí en la cruz. Mi vieja naturaleza carnal fue quitada en la cruz. Ahora no vivo en la muerte allí, sino que vivo en el poder de la resurrección.
La vida que ahora vivo la vivo en la fe del Hijo de Dios quien dio su vida por mí.
Pablo amonesta a los creyentes romanos. Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro” (Romanos 6:11)
Nuestras vidas son identificadas con Cristo. Somos identificados con él en nuestro bautismo el cual es un símbolo maravilloso de su muerte y resurrección. Es también un retrato espiritual de nuestra co-crucifixión, co-muerte, co-resurrección con Cristo.
Si yo coloco una tarjeta de 3x5 en medio de las paginas de mi Biblia esa tarjeta viene a ser parte de mi Biblia. Y a todo lugar que yo llevo mi Biblia la tarjeta va allí conmigo. Si yo pierdo mi Biblia también pierdo la tarjeta 3x5. La tarjeta es ahora parte de mi Biblia, de igual manera yo ahora soy identificado con Jesucristo a través de su muerte y su resurrección, y la vida nueva que el Espíritu Santo me ha impartido la cual está en Cristo. Voy a donde él va. (Por favor lea y compare Juan 10:27-30 y Juan 15)
El deseo del Apóstol Pablo fue “Y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia es que Dios por la fe; a fin de conocerle, e el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte...”(Filipenses 3:9-10)
“Por que si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más estando reconciliados, seremos salvos por su vida” (Romanos 5:10)
“De hecho, en el evangelio se revela la justicia que proviene de Dios, la cual es por fe de principio a fin, tal como está escrito: “El justo vivirá por la fe.” (Romanos 1:17, NIV)
CRISTO QUIERE VIVIR SU VIDA POR MEDIO DE NOSOTROS.
Es solamente la vida de Cristo---Su actividad, revestido de ti y desplegado por medio de ti, que últimamente puede encontrar la aprobación de Dios. Es el Señor Jesús sólo quien hace nuestros sacrificios sean aceptados por Dios.
Solamente lo que Cristo hace en ti y por medio de ti amerita la aprobación de Dios. Eso pueda ser la verdad más difícil de aprender en la vida cristiana. Jesús dijo a sus discípulos “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en Mi y yo en él, éste lleva mucho fruto. Pero separados de Mi, nada podéis ” (Juan 15:5)
Queremos hacerlo nosotros mismos. Hacerlo a nuestra manera, y de la manera que nosotros pensamos que es la mejor. Queremos obtener todo el crédito. Ahora que somos salvos pensamos que podemos hacer todo en nuestras propias fuerzas humanas. Aun tratamos de conducir su trabajo en nuestra carne. Dios no tendrá nada de eso.
Dios no aceptara nada si no es de la manera de él. Mucho de lo que hemos hecho en el nombre de Jesús será quemado porque lo hemos hecho en el poder y motivaciones carnales.
El apóstol Pablo dice:
“Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica. Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y lo obra de cada uno cual sea, el fuego la probará. Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego” (I Corintios 3:10-15)
Hay una forma de actividad cristiana que es razonable para un consumo inmediato. Nos Impresiona a todos. Atraerá multitudes. Producirá aplausos. Siempre producirá hedor detrás de si, si proviene de la carne. Nunca reproducirá el fruto del Espíritu Santo.
LA VIDA CAMBIADA ES UNA VIDA DE FE
¿Puede surgir cualquier situación posible en cualquier circunstancia, Para la cual Cristo sea suficiente? ¿Puede surgir cualquier tipo de presión, promesa, cualquier problema, y cualquier responsabilidad por la cual el Señor Jesús sólo no sea suficiente?
¿Cuando yo reconozco la total suficiencia de Cristo en mi, existe alguna situación a la cual Cristo no sea suficiente? Entonces es una indicación clara que yo no estoy en la voluntad de Dios.
Cristo es limitado solo por la medida de nuestras disponibilidades a todo lo que él hace disponible a nosotros.
LA VIDA CAMBIADA ES UNA VIDA CONTROLADA POR EL ESPIRITU
Ya que la vida cambiada es un paso de fe deberá ser una vida que esta llena o controlada por el Espíritu Santo. Cuando somos llenos por el Espíritu Santo estamos permitiendo que el Espíritu Santo ocupe nuestra personalidad completa con la cualidad de Cristo.
Jesús dijo, “El que cree en mi, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva. Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él, pues aun no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había sido aun glorificado” (Juan 7:38-39)
Cuando estoy bajo la influencia del Espíritu Santo yo estoy atraído sobre los recursos ilimitados de Cristo. La vida de resurrección de Jesús es impartida al verdadero creyente por la presencia del Espíritu Santo.
“Cristo vive en mí, y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20b)
Hace muchos años escuche a un evangelista argentino, Santiago Garaballe, dar una ilustración de un hombre que trajo un carro nuevo. Nunca había sido dueño de un carro en toda su vida. El carro venia con un poderoso motor. ¿Que sería de ese hombre si él terminara empujando el carro toda su vida? ¿Te imaginas que clase de vida sería para él? Cada ves que él fuera en el carro siempre sería necesario que alguien ande el carro y otra persona empujando! ¿Que pasa si alguien viene a él y le dijera, Santiago, Por que tu siempre andas empujando el carro? ¿Acaso es que no tienes gasolina en él?”
“ Por que, Si” dijo Santiago. “Vino con un tanque lleno de gasolina, pero no sabía que hacer con él.”
“Aquí, déjame enseñarte Santiago. Pon la llave aquí y empieza a encenderlo. Hombre, escuchas el motor arrancar....ahora si hay poder real. Ahora vamos a dar un paseo.”
En la vida cristiana tu tienes un motor fuerte bajo el fuelle, nada menos que la vida de resurrección de Cristo hizo disponible a usted por medio de la persona de Dios el Espíritu Santo quien vive en ti. Deja de empujar! Enciende el motor.Abandona toda tentación, toda oportunidad, toda eminencia de circunstancia, cada situación de amenaza a la energía divina de Cristo en ti.
Que maravilloso es estar en una intima y personal relación amorosa con Dios, que todo lo que tu necesites, en cualquier circunstancia, es siempre tuya, por la mano de Dios en ti.
DIOS TE HA DADO RECURSOS ILIMITADOS
“Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra..” (II Corintios 9:8). Wow! Esa es una promesa que Dios hace para todos nosotros.
“Gracia y paz sean multiplicadas, en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús, como todas las cosas que pertenecen a la vida y la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia” (II Pedro 1:2-4,)
Déjame ilustrar. Yo puedo decirle a este guante, “guante, levanta esta Biblia.” De manera que ese guante no podrá hacerlo. Tiene todos los recursos. Tiene un dedo grande, otros pequeños, y forma de una mano. De tal manera que es imposible hacer lo que yo mando a hacer. Por otro lado tengo otro guante que si a recogido muchas veces mi Biblia, pero cuando mi mano esta dentro de ese guante, el guante llega a tener la misma fuerza de mi mano, y todo lo que es posible a lo que mi mano haga, también para el guante le es posible hacer. El guante simplemente arropa la actividad de mi mano.
Dios puede usar cualquier guante viejo que ha sido reconciliado con él, y lo reserva para su uso.
Tú eres el guante y Cristo la mano. Todo lo que es posible para él es posible para ti.
El apóstol Pablo escribió a los corintios en Filipo, estas palabras de aliento, Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:13)
La presencia del Cristo viviente, por su espíritu dentro de ti, imparte a ti todas las cosas de la vida y de la bondad. Cristo ha proveído por ti todo lo necesario para vivir una vida de justicia.
Nos gozamos cuando cantamos este canto bonito:
Fuera de mi esclavitud, dolor y noche.....
Hacia la libertad, orgullo y luz........
Fuera de mis enfermedades hacia la sanidad......
Fuera de mis deseos hacia la riqueza.....
Fuera de mi pecado hacia ti mismo.....
Jesús, yo vengo a ti!
El anciano profeta Isaías describió una situación en la cual la gente de Israel se sintió débil para completar el propósito de Dios. El profeta les recordó acerca de un Dios eterno quien nunca esta agotado ni cansado. El nunca carece en sabiduría o poder para completar su propósito eterno. Aunque nosotros nos sintamos agotados o cansados él nos recuerda del versículo “Los que confían en el Señor renovaran sus fuerzas; volarán como las águilas; correrán y no se fatigaran; caminaran y no se cansaran.” (Isaías 40:31, NIV) En las versiones King James y New American Standard encontramos la siguiente palabra, “pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas. Isaías usa una palabra bonita para describir (qavah, kaw vaw) el único parentesco entre el Señor Dios y su gente quienes caminan por fe. La palabra traducida “esperar” o ”esperanza” en lo original tiene la idea de permanecer juntos (perhaps by twisting), i, e., coleccionar o juntar.
Para aquellos que pacientemente esperan en el Señor él nos da fuerza en nuestras vidas y nos da fuerza interna. Podemos vivir sobre oportunidades, los cambios de circunstancias de vida. Cambiamos nuestras debilidades por su fuerza. Solamente podemos tener esas fuerzas si esperamos en él y en acercarnos más a él.
Cristo no solamente murió por salvarte de tus pecados en el pasado, no por darte vida eterna para que tu puedas ir al cielo, sino para darte su vida de resurrección hoy.
Él da de su fuerza a tus debilidades. Te da de su sabiduría a tus tonterías. Él da de su gracia a tus anhelos. El da de su amor a tu lascivia. El da de su paz a tus conflictos. El da de su gozo a tus dolores. El da de su perdón a tus culpabilidades. Él da de su abundancia a tus pobrezas.
Por unos años era de mi costumbre andar en avión cada 2 meses a Bogota, Colombia de Quito, Ecuador. La ciudad de Bogota es muy bella mirándola desde lo alto de un avión. Mi amigo Eric vive en una ciudad alta en las montañas de los Andes. Su familia son dueños de la compañía Cessna. Un Domingo cuando yo estaba ministrando en una de las Iglesias Bautistas en Colombia, mi amigo Eric me invito a volar mientras el día estaba caluroso. Subimos hasta esta Cessna Séneca III que acababa de rodar de la línea de montaje. Estaba equipado con el último radar del tiempo a colores, y con un motor jet muy fuerte. Es un equipo con piezas maravillosas. Mientras volamos en lo alto y circulábamos podíamos ver la montaña áspera de Tabor asomándose por las nubes. Esa montaña hostil ha causado la muerte de cientos de pasajeros.
Supongamos que después de haber volado por un rato Eric me mira y me dice, “Don Wilfredo, toma los controles y empieza a volar este avión bonito.”
Yo respondo, “Eric, yo no puedo volar. No tengo licencia como piloto aquí en Colombia. ¿Por que? Nunca tome lecciones para volar un avión en mi vida.
“Don Wil, He sido bendecido con este regalo maravilloso que me facilita volar este avión a través de ti. Yo Tengo este poder secreto de entrar en tú mente, y mi espíritu volará este avión por tu medio Todo lo que tú tienes que hacer es confiar en mi. Wil con tu conocimiento y pon tu confianza en mi.”
Mis pensamientos fueron así: Eric tú eres un loco., Yo te he conocido por poco tiempo, pero tú pareces que ya lo olvidasteis.”
“No, Don Wil, solamente confía en mi, todo lo que tienes que hacer es eso confiar y yo podré volar este avión a través de ti, ahora toma tú la palanca!” Yo le dije, bueno no se nada de esto, pero trataré. Yo tomé los controles del avión III, hombre tú hablas acerca de un avión fácil de volar. Realmente es maravilloso, le daba para la derecha, para la izquierda y me alejaba de la montaña Tabor. El volar es un sueño. Los controles me respondían y volé tal como que si yo lo haya hecho antes y por mucho tiempo.
Después miré a Eric, y le dije muy emocionado, “hombre esto es bueno, mírame le estoy haciendo de lo mejor.” De repente el avión se descontrolo y también yo, si Eric no hubiese estado allí para controlarlo creo que hubiésemos estado en un peligro terrible.
La vida Cristiana es una vida cambiada. “Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, más Cristo vive en mí” (Gálatas 2:20) Pablo experimentó ese estilo de vida. Cuando estuvo en la prisión en la ciudad de Roma él dijo, “Para mí el vivir es Cristo” (Filipenses 1:21)
Ese es el resultado de la vida del cristiano. Jesús vino a mi vida a habitar desde el momento en que confesé mis pecados y la infidelidad hacia él. Me liberé de la infidelidad para poner mi fe y confianza en él como mi salvador personal. En el momento que nací espiritualmente un nuevo nacimiento tomó lugar, y allí es donde Cristo vino para vivir dentro de mi.
Jesús nos dice y nos pide que en el momento que caigamos en tentación, cuando nuestra fe falle, cuando pequemos, cuando estemos débiles, que confiemos en él. Tu no entras a tus propias fuerzas, si no que entras en las mías.
¿Estas tu viviendo en Cristo? Cristo es todo y esta en cualquier tiempo, en cualquier situación, y circunstancia. “Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, y vosotros estáis completos en él” (Colosenses 2:9,10)
Jesús dice que él nunca nos dejará ni desamparará. Estas tú descansando en él.

06/12/2011

Viviendo la Vida Cristiana

Sólo hay una persona que puede vivir la vida cristiana. Sí, puede ser vivida, pero sólo por el Señor Jesucristo.

Para vivir la vida cristiana usted debe tener el derecho de vivirla. La vida cristiana puede ser vivida por Cristo. Esto es Su vida, y es exclusivamente Suya para ser vivida sólo por Él.

¿Se ha encontrado alguna vez tratando de vivir la vida cristiana y sintiéndose como un fracaso? La razón es que sólo puede ser vivida en completa dependencia de Cristo.

La vida cristiana es una vida cambiada. Esta es vivida en dependencia de Cristo. Usted intercambia su vida por la vida de Cristo. De esta forma Él vive Su vida en y a través de usted.

El apóstol Pablo explica: ¨Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora lo vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.¨ (Gálatas 2:20).

Su vida puede latir con la vida maravillosa del Hijo de Dios, viviendo Su vida en usted cuando usted se apropia de esta por fe. Cuando usted hace cada demanda sobre usted, es una demanda sobre Cristo que mora y lo llena por Su Espíritu.

¿Hay alguna demanda en Cristo que Él no puede cumplir? ¿Es usted incapaz para satisfacer alguna necesidad apremiante o demanda? Usted puede ser, pero Cristo no lo es.

La demanda no esta en usted, sino en Cristo. Por lo tanto, deja que tu vida sea un ejercicio interminable de fe, tomando de Cristo todo lo que Él desea de ti. ¿Usted necesita paciencia, sabiduría, amor incondicional y fuerza? Usted puede tomar sin límites de aquel que vive y permanece en usted.

Este es el secreto para vivir una vida que vence la tentación. El apóstol Pablo nos dice que cuanto más obtiene de Él por la fe, menos usted vive en la carne. "Digo, pues: Andad en el Espíritu y no satisfagáis los deseos de la carne" (Gálatas 5:16). Cuando usted camina en el Espíritu, la vida de Cristo fluye a través de usted.

Existe la necesidad constante para el creyente de permanecer en Cristo. ¿Se ha convertido Cristo en su lugar de refugio? ¿Usted regresa a Él en repetidas ocasiones? ¿Ha hecho usted un hábito de morar en Su presencia a través de la fe en Él, la lectura de Su Palabra, a través del arrepentimiento y la llenura de Su Espíritu, a través del amor y la obediencia a Su Palabra como un testimonio vital de su gracia salvadora?

¿Cómo ha llegado a conocer a Cristo en una experiencia íntima de amor? Nosotros debemos aprender a vivir cada momento en Su santa presencia.

Usted permanece en Él cuando usted camina por la fe en Él, creyendo en Él para todo lo que Él quiere hacer en y a través de usted, para alcanzar este mundo con Su mensaje de amor. ¿Esta esperando Él que usted confíe en Él para que Él pueda compartir más de sí mismo con usted?

Usted permanece en Cristo cuando Él se comunica con usted por medio de Su Palabra y cuando usted responde en oración. Haga de esto un hábito, caer de rodillas cuando Él le habla por medio de las Escrituras. El Espíritu Santo toma la Palabra de Dios, la interpreta, y la aplica a usted. Haga de esto un hábito diario. Solo entonces Él le revela a Jesús.

Usted permanece en Cristo al confesar inmediatamente todos los pecados que el Espíritu Santo le hace ser consciente, y la apropiación por la fe la limpieza de la sangre de Jesús. Usted mantiene esta relación íntima de amor por la confesión, la limpieza y cediendo Su señorío en su vida.

Usted permanece en Cristo, por ser un testigo obediente a Aquel que vive en usted. Ore diariamente, que Él le llevará a donde Él está trabajando en la vida de las personas a su alrededor. Haga todo lo que Cristo le pide hacer en Su fuerza y sabiduría. Al hacerlo, el intercambia tu vida por Su vida, entonces Él puede dar expresión de Su vida incomparable a través de usted.

Luego, cuando Satanás toca a tu puerta, deja que Jesús conteste. "Mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo" (1 Juan 4:4).

Ya que Cristo está en usted, usted esta lleno de Dios. Déjalo vivir Su vida en usted. Él da expresión de Su vida en nosotros por la liberación a través de nosotros. Cuando Él pone Su vida a través de usted, usted es cambiado en el proceso.

Permaneced en Él, y Él en vosotros.